No necesitas acudir a curiosos o hechiceros, ni asistir a rituales costosos; desde aquí te recomendamos utilizar los salmos para atraer la prosperidad a tu vida, ya que son oraciones que cuentan con la aprobación divina y son mágicas. Sus bendiciones e historias de favores concedidos con ellos son incalculables y datan desde mucho antes del nacimiento del hijo de Dios.

Para hacerte un recorrido ameno de éstos, te iremos indicando su ubicación en la biblia, la forma de leerlos y para qué se utilizan; de esta manera tendrás una guía completa de los salmos poderosos que te ayudarán a tener prosperidad en tu vida.

Salmos para la prosperidad

  • Salmo 65: es un salmo que normalmente se lee al despuntar la mañana, con los primeros rayos del sol y, si se realiza al aire libre mucho mejor. Fue elaborado por el salmista para dar gracias a Dios por la productividad de las siembras, los frutos y sus bendiciones; en la actualidad se lee para agradecer a Dios el pan de cada día y a la vez para que siga permitiendo que llegue el sustento a los hogares en abundancia. A continuación, te mostramos un fragmento del mismo:

“(…)Tú visitas la tierra y la riegas en abundancia,
en gran manera la enriqueces;
el río de Dios rebosa de agua;
tú les preparas su grano, porque así preparas la tierra.
10 Riegas sus surcos abundantemente,
allanas sus camellones,
la ablandas con lluvias,
bendices sus renuevos.
11 Tú has coronado el año con tus bienes,
y tus huellas destilan grosura.
12 Destilan los pastos del desierto,
y los collados se ciñen de alegría.
13 Las praderas se visten de rebaños,
y los valles se cubren de grano;
dan voces de júbilo, sí, cantan.”

  • Salmo 103: otro hermoso salmo para atraer la prosperidad en tu vida, que puedes leer en cualquier momento en medio de la tranquilidad; fue creado por el salmista para agradecer a Dios padre por su misericordia. Es un hermoso recordatorio de que Dios perdona nuestros errores y bendice a los que le temen y su descendencia, un regalo divino de parte del salmista, ya que nos hace ver que somos bendecidos con un Dios tan generoso. Acá te dejamos parte del salmo para que lo disfrutes:

“ (…) 8 Compasivo y clemente es el Señor,
lento para la ira y grande en misericordia.
9 No contenderá con nosotros para siempre,
ni para siempre guardará su enojo.
10 No nos ha tratado según nuestros pecados,
ni nos ha pagado conforme a nuestras iniquidades.
11 Porque como están de altos los cielos sobre la tierra,
así es de grande su misericordia para los que le temen.
12 Como está de lejos el oriente del occidente,
así alejó de nosotros nuestras transgresiones.
13 Como un padre se compadece de sus hijos,
así se compadece el Señor de los que le temen.
14 Porque Él sabe de qué estamos hechos,
se acuerda de que somos solo polvo.
15 El hombre, como la hierba son sus días;
como la flor del campo, así florece;
16 cuando el viento pasa sobre ella, deja de ser,
y su lugar ya no la reconoce.
17 Mas la misericordia del Señor es desde la eternidad hasta la eternidad, para los que le temen,
y su justicia para los hijos de los hijos,
18 para los que guardan su pacto
y se acuerdan de sus preceptos para cumplirlos (…)”

  • Salmo 123: un salmo para leer al terminar la noche, antes de dormir; creado por el salmista en tiempos de desesperación, pidiendo justicia ante malos tratos de jefes y abusos. Este salmo se lee para pedir su intersección en el trabajo, para que sea él actuando en nuestros superiores que suavice su trato y compensaciones hacia nosotros, con él se busca mejorar las condiciones laborales y así aumentar los ingresos y la prosperidad. A continuación, te dejaremos el salmo completo:

1 A ti levanto mis ojos,
¡oh tú que reinas en los cielos!
2 He aquí, como los ojos de los siervos miran a la mano de su señor,
como los ojos de la sierva a la mano de su señora,
así nuestros ojos miran al Señor nuestro Dios
hasta que se apiade de nosotros.
3 Ten piedad de nosotros, oh Señor, ten piedad de nosotros,
porque muy hartos estamos de desprecio.
4 Harta en extremo está nuestra alma
del escarnio de los que están en holgura,
y del desprecio de los soberbios.

Estos son solo algunos de los salmos para atraer la prosperidad a tu vida; muchos incorporan a ello el salmo 90-91 para pedir a Dios su protección en todo momento y aleje o amanse a los enemigos. Recuerda siempre que todo lo que pedimos con fe Dios lo recibe en el cielo y sus tiempos son perfectos, así que no te desesperes al no ver su acción inmediata, él trabaja en silencio dentro de tu vida.